jueves, 9 de julio de 2020

Hoy hace 2 años inició el sueño americano

Un día como hoy hace 2 años iniciaba una nueva etapa en mi vida: El Sueño Americano

En realidad empezó un poco antes, unos meses antes. Debió de haber sido por ahí de inicios del 2018 cuando se presentó ante mí dicha oportunidad. Pero primero voy a dar un poco más de contexto.

Cuando recién terminé la universidad y comencé a trabajar profesionalmente tenía el sueño de en algún momento trabajar en alguna empresa grande de TI en Estados Unidos, en realidad esa empresa siempre fue Google. Por aquellos años (principios de la década del 2010) Google estaba en su boom, era la empresa que más estaba innovando. Primero con el buscador, después Gmail con varios gigas de espacio, Google Wave, Chrome, etc. Todos esos productos eran innovadores de alguna u otra manera y eso aunado a una campaña publicitaria de sus oficinas y lo cool que era trabajar ahí, rápidamente seducía a cualquier ingeniero. 

En mi caso, pensaba que lo mejor era adquirir un poco más de experiencia "local", mejorar el inglés y prepararse para las entrevistas. Sí, en aquellos tiempos era cuando se corrían todos esos rumores de las entrevistas imposibles de Google, era la moda pues. Así que pensaba que necesitaría un buen de experiencia y preparación para poder pasar la entrevista.

El tiempo pasó. Nunca "terminé" de prepararme lo suficiente y por ende nunca apliqué. Ya con más madurez y experiencia, y después de conocer experiencias de otras personas trabajando en Estados Unidos como ingenieros de software mi sueño cambió. Ya no sentía un interés por trabajar en una empresa top en Estados Unidos. ¿Razones? varias. Mismas que ameritan un post después para hablar sobre esto.

El punto es que dos años atrás se me presentó la oportunidad de trabajar en Estados Unidos como ingeniero de software y después de pensarlo, meditarlo y repensarlo. Tomamos la decisión de venirnos para acá. Una decisión muy difícil pero que hasta el día de hoy puedo decir que ha valido la pena.

Mi primer día laboral fue un lunes 9 de Julio de 2018 pero llegamos a nuestro destino final dos días antes, el sábado 7 de Julio de 2018. Después de un viaje por carretera de 4 días desde Tepic Nayarit, México hasta Redwood City California, Estados Unidos.

Fue un viaje inolvidable. Nunca habíamos manejado tanto, nunca en otro país. Nos tocaron climas extremos, paisajes que no habíamos visto antes, montañas enormes, el desierto, lagos, etc. Subimos, bajamos. Fue cansado pero fue genial. Con muchos nervios antes de cruzar la línea. Al final todo salió bien. Llegamos sanos y salvos. 

Este fue el itinerario del viaje:
  • Día 1: Salida de Tepic Nayarit hasta Ciudad Obregón Sonora.
  • Día 2: Salida de Ciudad Obregón Sonora hasta Phoenix Arizona.
  • Día 3: Salida de Phoenix Arizona hasta Santa Barbara California.
  • Día 4: Salida de Santa Barbara California hasta Redwood City California.

Todavía en México

En Hermosillo. El carro sucio del viaje

La fila en la aduana de Nogales

En Arizona nos tocó una tormenta de arena. Estuvo muy fuerte, tanto así que tuvimos que parar casi una hora porque era imposible ver los carros al frente o atrás.

Rumbo a la tormenta de arena

Tuvimos que parar por seguridad

El viaje lo puedes hacer en tres días (dos si tienes mucha prisa) pero nosotros decidimos pasar un día en Santa Barbara para conocer la playa y relajarnos un poco.

Playa de Santa Barbara en California

Llegamos el sábado a medio día a descansar un poco y el domingo nos dedicamos a terminar los últimos pendientes para estar listo para mi primer día de trabajo. Básicamente el domingo compré mi Clipper Card para poder transportarme en el BART hacia la oficina en San Francisco.

Fin del viaje, después de 3 mil KM

Finalmente la primera foto de San Francisco desde la oficina

En retrospectiva puedo decir que este viaje nos ha traído muchos aprendizajes, mucha madurez y a pesar de que no ha sido fácil, todavía sigue valiendo la pena. 

Después de dos años fuera de tu país aprendes a valorar muchas cosas que de otra manera difícilmente te darías cuenta. 

Es curioso porque el primer año fue básicamente de adaptación. El segundo pintaba para cosas más divertidas pero la pandemia se atravesó. Aún así, tratamos de disfrutar cada momento. Y con todo y todo, hoy que ya llevamos dos años, me siento feliz de todo lo que hemos vivido. 

Siempre he creído que lo mejor que te dejan los años son las experiencias y las personas. El poder venir para acá nos ha permitido conocer personas que se han vuelto parte de nuestras vidas (de alguna u otra manera), a pesar de que acá las relaciones humanas son más frías sabemos que tenemos amigos con los cuales podemos confiar y sentir ese apoyo (que vaya que sí lo resientes cuando vives en otro país, sin tus familiares y amigos).

Estamos bien, y como dijera Cerati: 

"Ahí vamos..."



lunes, 6 de julio de 2020

Hoy hace 11 años hizo un buen día

Un día como hoy pero de hace 11 años iniciaba mi vida laboral. Todo comenzó cuando estaba a punto de culminar la carrera. Todavía me quedaba una última materia que cursar, dicha materia era la de las prácticas profesionales.

Las prácticas profesionales consisten en estar al menos tres meses (máximo seis) trabajando en una empresa. Durante ese periodo la empresa puede darte un apoyo económico y al finalizar, si tu desempeño fue bueno la empresa puede ofrecerte un empleo.

En realidad el objetivo es cumplir un periodo de unas 500 horas de trabajo en la empresa en un mínimo de 3 meses y un máximo de 6.

Hoy hace 11 años inicié mis prácticas profesionales en una empresa de desarrollo de software llamada Medisist. Medisist se encuentra en la ciudad de Guadalajara Jalisco. Yo vivía en Tepic Nayarit por lo tanto tuve que cambiar de ciudad y mudarme a Guadalajara. Era la primera vez que salía de mi casa para irme a vivir a otro lugar.

Todavía recuerdo mi primer día. Al llegar a la oficina nos mandaron a una sala de juntas (sí, plural porque éramos varios practicantes los que iniciábamos ese lunes). Éramos alrededor de 6 practicantes nuevos. La mayoría de ellos venía de Zacatecas. Nos dieron una pequeña sesión de introducción sobre la compañía, las instalaciones, los proyectos en los que íbamos a estar asignados cada uno y nuestros lugares de trabajo.

He de confesar que tenía nervios pues era mi primera interacción con el ambiente laboral desarrollándome en lo que había estudiado los pasados 4 años pero al mismo tiempo me sentía contento de por fin comenzar a hacer lo que tanto me gusta.

Además, a pesar de que conocía Guadalajara y había visitado varias veces la ciudad, ahora era diferente pues tenía que adaptarme para vivir. Comparada con Tepic, Guadalajara es una ciudad mucho más grande, que para alguien que viene de un lugar tan pequeño, impone. Tuve que aprender a transportarme en camiones (en Tepic siempre usé camiones) algunas veces tomando más de uno para poder llegar al lugar que quería ir y sobre todo acostumbrarme a distancias largas, pues mientras que en un camión en Tepic en 20 minutos recorrías prácticamente la ciudad, en Guadalajara los recorridos que hacía eran como de una hora.

Sin lugar a dudas haberme salido de mi ciudad natal para empezar a desarrollarme profesionalmente me ayudó muchísimo. Fue duro, prácticamente tuve que dejar mi vida y comenzar una nueva. Suena exagerado pero así fue. Empiezas a distanciarte de tus amigos y conocidos y al mismo tiempo empiezas a formar nuevos lazos en la ciudad donde llegas. Yo tuve la fortuna de conocer muy buenas personas en mi primera etapa de recién egresado, algunos todavía los tengo en el face aunque ya no convivimos sé que están bien. Mi etapa en Medisist fue corta, como de un año y medio, sin embargo la recuerdo con mucho cariño.

Han pasado 11 años ya y sí, se siente lejos. Inclusive ya no me acuerdo de algunos compañeros. Como quiera que sea, fueron los cimientos para forjar ésta carrera que me ha dado tanto, que le debo muchísimo y que todavía al día de hoy me apasiona como la primera vez que me senté en un escritorio y empecé a escribir código profesionalmente hace 11 años.

lunes, 29 de junio de 2020

En tiempos de Coronavirus (3)

Han pasado 16 semanas de confinamiento. 16 semanas es el equivalente de 4 meses. 4 meses de confinamiento. Aunque estas últimas semanas se ve mayor movimiento de gente aún no estamos en un ritmo que podamos decir que todo regresó a la normalidad.

Nosotros continuamos saliendo a algunos lugares pare evadir un poco esa sensación de muchos días de encierro. Tratamos de ir a lugares en los cuales no hay tanta gente pero cada vez más gente nos toca ver.

La semana pasada fuimos a conocer las playas de Pacific Grove que están como a 2 horas. Reservamos un pequeño hotel y visitamos algunas playas del rededor.


martes, 9 de junio de 2020

Todo vuelve

Últimamente me vienen recuerdos sobre algunas etapas de mi vida que inconscientemente había ignorado durante algún tiempo. Y es que mientras más maduras, más te olvidas de ciertas cosas, de cosas simples que en algún momento fueron el centro de tu vida.

He estado recordando algunas situaciones de cuando estaba estudiando la carrera en el ittepic. Recuerdo los primeros años de la carrera, por alla del lejano 2005. Hace unos 15 años más o menos. Por aquellos tiempos tenía objetivos y metas muy distintas.

Sin lugar a duda, la etapa del tec me marcó mucho. Haber estudiado Sistemas Computacionales me ha permitido hacer una de las cosas que más me apasiona durante tantos años. Conocí muchas personas, unas de ellas que inclusive hoy son parte esencial en mi vida. Recuerdo con cariño algunos maestros a los cuales les debo mucho pues forjaron esas bases para poder desarrollarme profesionalmente.

Hoy en día, a 10 años de haber terminado esa etapa me pregunto ¿qué habrá sido de mis maestros? ¿seguirán igual las instalaciones?, ¿la biblioteca?.

Creo que este sentimiento se puede sintetizar en lo que llamamos nostalgia. Que a mi forma de entender, no es otra cosa que recordar experiencias pasadas que fueron gratas (o quizá no tanto) y que de alguna manera añoras con volver a vivirlas. ¿Será? ¿me ha llegado mi dosis de nostalgia? veremos...


jueves, 28 de mayo de 2020

En tiempos de Coronavirus (2)

S eguimos en cuarentena. Ya es la semana 12 y todo sigue más o menos igual. Todo parece indicar que el número de contagios empieza a descender aca en Estados Unidos lo cual implícitamente provocará que más y más negocios empiecen a abrir de nuevo.

El fin de semana fuimos a la playa de Santa Cruz para dar una vuelta, el plan solo era subirse al carro, tomar la 1 que es toda la costera y recorrer la playa desde el carro. Durante todo el camino vimos gente acudiendo a las playas a pesar de que todos los parkings estaban cerrados. También vimos a varios policías sancionando y reportando los carros que quedaron estacionados al lado de la carretera. Creo que el hecho de que fue un holiday contribuyó a que mucha gente decidiera salir. Y parece ser que cada día más y más gente empieza a retomar su rutina.

Santa Cruz Beach

Por otro lado, estamos yendo con mayor frecuencia a la reserva que tenemos aquí cerca a 5 minutos (Milagra Ridge) para desconectarnos un poco más de la rutina, del ocio, de todo. Estamos a punto de terminar el Zelda con todos los templos.

Milagra Ridge

martes, 14 de abril de 2020

En tiempos de Coronavirus

En estos momentos transcurre ya la sexta semana de nuestro encierro por Covid-19 aqui en la Bay Area. Otros paises llevan más semanas otros menos. La pandemia que ha azotado a casi toda la población mundial. Aún no hay una fecha exacta de cuando se podrían reanudar las actividades cotidianas, al mismo tiempo las cifras de contagiados y muertos siguen en aumento.

Ésto sin lugar a dudas ha sacudido a muchos, si no es que a todos y ha sacado desde los lados más bondadosos hasta lo más cruel y vil de las personas. 

Yo, mi familia, amigos y conocidos nos encontramos bien hasta ahora. La mayoría de mis conocidos ha podido mantenerse en sus casas y los pocos que no pueden han tratado de exponerse lo menos posible, lo cual ha permitido mantenernos sanos.

Lo peor de esta crisis no será la cuestión de salud, si no más bien, la cuestión económica. Miles de personas han perdido sus empleos, otros que son dueños de negocios están cerrados pero siguen resistiendo con la esperanza de mantenerse ellos y sus empleados subsistiendo mientras todo vuelve a la normalidad. El golpe económico será duro, viene fuerte, está a la vuelta de la esquina y nos va a pegar a todos.


lunes, 17 de febrero de 2020

¿Cosas simples? Legado

Con el paso del tiempo he aprendido varias cosas pero una de las más importantes es la idea de que mientras más simple es mejor. En el desarrollo de software, por ejemplo, a la hora de escribir código, mientras más simple el código, mejor. La razón es muy simple, en algún punto ese código tendrá que ser mantenido y eso implica que se tenga que analizar de nuevo. Mientras más simple sea es más simple de comprender por la persona que lo esta leyendo, inclusive por la persona que lo escribió tiempo atrás.

Así como en el desarrollo de software mientras más simple mejor, en otros aspectos de la vida es igual. Por ejemplo, con el paso del tiempo he aprendido a comprender y a valorar las cosas simples.

¿A qué me refiero con cosas simples? Contemplar un amanecer, una puesta de sol, un árbol, el cielo, una mascota, la pareja, etcétera. Contemplar, brindarle el tiempo de análisis y reflexión a algo. Contemplar, evaluar, detenerse, olvidarse de todo lo demás.

Hoy en día, nuestro día a día esta determinado por la prisa, por la inmediatez. Reviso mi teléfono, consulto Internet, noticias, lo que está pasando. Reviso todo en segundos, si me toma más de diez segundo se vuelve aburrido, me aburre, me deshago de eso. La gente no contempla, no analiza, no piensa. Sólo se actúa mecánicamente. Mientras más simple más aburrido.

No voy a ahondar en esto pues merece un post bastante extenso para su análisis correcto. Sin embargo, quiero ponerlo a la mesa porque el día de ayer tuve la suerte de encontrar algo de esas cosas simples pero que definitivamente representan un gran valor.

Resulta que ayer, paseando por una de esas grandes franquicias de tiendas de libros me encontré con un estante sobre artículos de colección de Studio Ghibli. Entre muñecos de peluche, revistas, agendas, tazas y hasta platos, hubo uno que llamó inmediatamente mi atención. Un set de colección de 100 postales basado en las películas de Studio Ghibli de 1984 a 2014. Me pareció un detalle genial, aunque sólo son impresiones en papel de escenas de las películas, es algo que puedes contemplar cuando quieras, que inclusive puedes ir regalando, puedes esconder, repartirlas esperando algún día volver a reunirlas o simplemente verlas de nuevo y recordar momentos, personas, lugares, tiempos, tiempos mejores, etcétera. Así que decidí llevármelo. Y si de plano termina por ahí guardado, espero poder en algún punto heredarlo a alguien que pueda apreciarlo.

Las películas de Studio Ghibli son bastante especiales, muestran muchos valores y te invitan a hacer conciencia sobre temáticas como la naturaleza, los animales, la coexistencia entre humanos y los demás seres vivos, las tradiciones milenarias, entre otras. Sin lugar a duda vale la pena verlas.




miércoles, 5 de febrero de 2020

Sueños?

Hoy volví a tener el sueño que esporádicamente se me presenta: Tiempos de estudiante, realizando un examen de titulación o algo parecido. De esos exámenes que son los finales para poder titularte.

No es que sueñe todo los días eso pero he notado que esporádicamente, cada cierto tiempo, quizá meses, ese sueño regresa.

El día de hoy desperté y estuve pensando en lo que acababa de soñar. Básicamente estaba sentado en un aula, con dos o tres compañeros más (los únicos que todavía teníamos pendiente ese examen) y resulta de después de un rato ahí sentado, con presión por pasarlo y poder titularme al fin. Terminé angustiado pues no pude contestar ni una sola pregunta. Ni de Español, ni de Ciencias... Nada. Cuando la maestra nos anunció que el tiempo había terminado y era hora de regresarle los exámenes, le entregué el mio y le pregunté que cuando era el siguiente examen para volverlo a presentar (mi última oportunidad). Me comentó que era en tres días más y me angustié más pues le comenté que no había podido contestar ni una sola pregunta y que era por que no me había preparado, que hacía años que había terminado la escuela y solo me había enfocado en trabajar, por lo tanto me fue difícil recordar todas esas clases de Español, Matemáticas y Ciencias. Me empecé a sentir más preocupado y justo después de ese momento desperté.

Todavía recostado en la cama, me puse a reflexionar acerca de por qué soñaba esa temática un poco frecuentemente... quizá sea por la preocupación de dejar algunas cosas inconclusas. Dejarlas pendientes. En este caso, "terminar" la carrera, posponer la titulación y empezar a trabajar... Aunque en mi caso tuve la fortuna de titularme en automático debido a mi promedio durante la carrera.

Después pensé que tal vez era debido a una necesidad de querer seguir estudiando algo más. Por ejemplo, una maestría. Sí!, eso debió ser (pensé). Tomé mi celular y empece a buscar maestrías en línea.